¡Ay y aquí nos topamos con otro río!, “nilo huelas”, de verdad que quiero andar así con la nariz tapada porque el olor está potente amigos, con ganas de salir corriendo por la asquerosidad y contaminación que se respira aquí, ¡ay no, yo, ya me voy!

Pero los que llevan meses soportando la pestilencia, son los habitantes, esto como consecuencia del drenaje público que se encuentra colapsado por falta de desazolve, lo que provoca que se forme este peculiar río.

Recuérdenle al alcalde sobre Tetecolala, denuncian vecinos