El empresario Raúl Rocha Cantú, conocido por ser el dueño de Miss Universo, atraviesa uno de los momentos más complicados de su vida. Un tribunal colegiado le dio un duro golpe legal al revocar la suspensión que impedía su captura, lo que abre la puerta para que sea detenido en cualquier momento por autoridades federales.
La Fiscalía General de la República (FGR) lo señala como parte de un grupo criminal dedicado al contrabando de combustible y armas de fuego, con operaciones que iban desde Estados Unidos y Guatemala hasta México, además de presuntos vínculos con organizaciones del narcotráfico.