El corazón de esta tradición navideña en México late en los siete picos de la piñata. Cada uno tiene un significado profundo… ¿te los sabes? Quédate en Azteca Morelos y déjate envolver por la magia de nuestra cultura.
Las piñatas son invitadas de honor en nuestras fiestas: posadas, Navidad, Año Nuevo, cumpleaños y cualquier merequetengue donde haya alegría y ganas de convivir. Romperla no es solo diversión: es una pequeña batalla por los dulces, la risa y la unión familiar.
Su historia nos lleva hasta el ex Convento de San Agustín en Acolman, Estado de México, donde hace más de 400 años nació la primera piñata, creada prácticamente igual que hoy. Se rellena con dulces, cacahuates y, a veces, fruta (aunque esa opción suele acabar hecha trizas).
La piñata tradicional tiene siete picos, símbolo de los siete pecados capitales:
- Pereza
- Ira
- Avaricia
- Gula
- Lujuria
- Soberbia
- Vanidad
La tradición dicta cubrirse los ojos: un recordatorio de que la fe se vive sin ver, confiando. Con el palo, se golpea la piñata para “romper” esas tentaciones y dejar caer la recompensa: la dulzura que espera al final de la lucha.
