El mundo del boxeo se sacudió tras conocerse que Anthony Joshua sufrió un accidente automovilístico en Nigeria. El percance dejó dos personas muertas, aunque el campeón británico salió solo con lesiones leves.
Joshua viajaba en la parte trasera de una camioneta cuando esta impactó contra un camión detenido en la autopista. El vehículo quedó destrozado, pero el púgil logró sobrevivir.
Este no es el primer caso de un boxeador involucrado en accidentes de tránsito. En 1982, el mexicano Salvador Sánchez, campeón mundial pluma, perdió la vida en un choque en Querétaro. En 2007, el estadounidense Diego Corrales, campeón ligero, falleció en un accidente de motocicleta en Las Vegas. Y el venezolano Edwin Valero también sufrió percances automovilísticos antes de su trágico final.
Estos sucesos muestran que, fuera del ring, los boxeadores también enfrentan riesgos que pueden marcar sus vidas.
El accidente de Anthony Joshua y otros casos en la historia del boxeo nos recuerdan que la carretera puede ser tan peligrosa como el cuadrilátero. La prevención y la seguridad son vitales dentro y fuera del deporte.
