El famoso ‘guajolocombo’, formado por la guajolota (torta de tamal en bolillo) acompañada de un atole caliente, es un desayuno típico en la Ciudad de México y otras zonas del país como en Morelos. Su sabor y practicidad lo han convertido en una opción recurrente para iniciar el día.
Pero... recientemente se dio a conocer que este combo trae consigo un alto contenido calórico que puede superar fácilmente las 1,000 calorías en una sola ingesta. Consumo que podría ser altamente dañino para tu salud si lo consumes frecuentemente.
¿Por qué el guajolocombo puede dañar la salud?
A pesar de lo práctico, económico y rico que puede ser este manjar mexicano, las altas calorías que combinan pueden ser alarmantes... la guajolota por sí sola puede aportar entre 800 y 1,000 calorías, debido a la combinación de masa, bolillo y relleno, principalmente de maíz o harina refinada. Si a esto se le suma un atole (rico en azúcares y carbohidratos), el exceso energético puede derivar en problemas como sobrepeso, obesidad, diabetes y complicaciones cardiovasculares si se consume de manera habitual.
¿Cada cuándo es recomendable comerlo?
Nutriólogos coinciden en que el ‘guajolocombo’ no es dañino si se consume de manera ocasional, como un almuerzo esporádico. El riesgo surge cuando se convierte en una comida cotidiana, ya que no aporta el balance adecuado de proteínas, fibra y vitaminas que requiere el organismo para un inicio de día saludable.
Aunque no todo está perdido, ya que especialistas sugieren sustituir el atole por bebidas menos azucaradas como café, té o leche baja en grasa, así como complementar la guajolota con vegetales o proteínas magras. De esta manera, podrás disfrutar de este rico platillo sin comprometer tu salud a largo plazo.
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