Entre las buenas noticias y logros de los activistas protectores de animales, es la historia de “Mark”, un oso pardo que por dos décadas ha vivido entre las rejas, no precisamente de una cárcel, si no en una jaula de apróximadamente 100 metros cuadrados dentro de un restaurante en Albania.
Y sí, por veinte años “Mark” estuvo encerrado solo para disfrute de los comensales que acudían a consumir alimentos en el conocido restaurante de la Ciudad de Tirana, “Sofra e Ariut”, (Mesa del Oso), donde también vivía con su hermana osa llamada “Lizza”.
Hace unos días luego de la gran lucha por parte de activistas de la organización “Four Paws”, se logró el rescate del oso pardo, mismo que fue anesteciado para ser llevado a un santuario ubicado al norte de Austria.
Después de una vida de encierro, por fin “Mark” podrá ser libre y tener una vida más digna en el refugio austrico, “Aberbasch”.
Su hermana “Lizza” no tuvo la misma suerte
Desafortunamente, “Lizza”, hermana de “Mark”, no tuvo la misma suerte y no pudo ser rescatada a tiempo, fue hace dos años que la osa murió a causa de las malas condiciones e inadecuada alimentación en las que por muchos años vivieron.
Ambos osos pardos llegaron al mencionado restaurante desde cachorros, luego de que su madre fue asesinada por cazadores, además, vivieron en condiciones extremas durante el invierno y nunca se les permitió hibernar.
La salud del oso “Mark” no es favorable
Debido a que por dos décadas “Mark” se la pasó enjaulado para ser “admirado” por los comensales que asistían al restaurante albanés, desarrolló estrés, ansiedad y tiene sobrepeso, además de problemas en las articulaciones.
Su condición se hizo más aguda tras la muerte de su hermana “Lizza” en el año 2022, lo que ocasionó que se hiciera más agresivo. Ahora, “Mark” necesitará de muchos cuidados para recuperarse y poder pasar sus últimos años en mejores condiciones de una forma, por fin libre.
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