¿Y si la envidia no fuera tan mala como pensamos?

Sentir envidia no te hace una mala persona. De hecho, podría ser una señal valiosa. Según la RAE, la envidia es “tristeza por el bien ajeno”. Pero voces como la de Ashley Frangie, en su popular pódcast, invitan a verla con otros ojos.

Viral y Tendencia
Compartir
  •   Copiar enlace

Ella cuenta cómo dejó de culparse por sentirla y empezó a usarla como brújula: ¿Qué deseo que aún no me estoy permitiendo? En lugar de reprimirla o negarla, puedes convertir la envidia en una herramienta para reconocer tus verdaderos anhelos. ¿Sientes algo cuando ves a alguien lograr un objetivo? Tal vez ese sea el recordatorio de un sueño olvidado.

Aceptar la envidia, cultivar la gratitud, celebrar los logros ajenos y evitar comparaciones destructivas son claves para transformarla en acción.

En lugar de hundirnos en el "¿por qué él sí y yo no?”, probemos el "¿cómo puedo lograrlo yo también?” La próxima vez que sientas envidia, escucha con atención: puede estar señalando el camino hacia una vida más auténtica.

¿Tú también has sentido envidia alguna vez? Cuéntanos y únete a la conversación en las redes de Azteca Morelos.

¿Qué pasa después de la muerte? 7 minutos de conciencia

[VIDEO] ¿Qué verías en tu mente si murieras por siete minutos?

Contenido Relacionado
×