¿Qué pasa con Tylor Chase? Lo que se sabe sobre el exactor del ‘Manual de supervivencia escolar de Ned’

Tylor Chase, recordado por su participación en la serie infantil 'Manual de supervivencia escolar de Ned', volvió a generar preocupación en los últimos días luego de que se difundieran imágenes y testimonios que lo muestran en situación de calle en Riverside, California, con un evidente deterioro en su estado físico y emocional.

La situación del exactor infantil ha movilizado a familiares y conocidos del medio artístico, quienes han intentado activar mecanismos de ayuda médica y de salud mental, en medio de un contexto legal que limita la intervención forzada.

De acuerdo con reportes recientes, Chase presenta problemas de salud mental y adicciones, situación que se ha agravado en las últimas semanas. En días recientes fue retenido de forma temporal para una evaluación psiquiátrica, donde recibió atención básica y fue sometido a un proceso de desintoxicación inicial.

Sin embargo, tras cumplir el periodo de observación, fue dado de alta, ya que las autoridades determinaron que no podía mantenerse bajo resguardo sin su consentimiento. Posteriormente, fue visto nuevamente viviendo en la calle, rechazando atención médica continua y programas de rehabilitación.

Shaun Weiss, actor y amigo cercano de Tylor, ha hecho llamados públicos para que las personas no lo graben ni se acerquen solo por morbo, y ha pedido respeto para facilitar los intentos de ayuda.

A estos esfuerzos también se sumó Daniel Curtis, quien ha colaborado contactando servicios de emergencia y equipos de crisis, además de fungir como enlace con autoridades locales para buscar opciones de resguardo y atención especializada. Pese a ello, las gestiones no han logrado sostenerse, principalmente por la negativa del propio Chase a permanecer en tratamiento.

Bajo la legislación vigente en California, una persona adulta no puede ser obligada a recibir tratamiento médico o psiquiátrico si no representa un riesgo inmediato para sí misma o para terceros. Esta situación ha generado frustración entre quienes intentan ayudarlo, ya que los periodos de atención han sido breves y sin seguimiento a largo plazo.

Mientras tanto, Chase continúa en una condición de alta vulnerabilidad, enfrentándose a los riesgos de vivir en situación de calle, especialmente por las bajas temperaturas y el consumo de sustancias.