Ya casi llega Navidad y en las colonias Zaragoza y la Florida, en Tlaltizapán, la cosa sigue tan árida que cualquiera pensaría que viven en pleno desierto del Sahara, pero sin camellos y con el doble de baches. Entre polvaredas y brincos, los vecinos denuncian que la calle Lindero tiene de todo menos lo lindo. Dicen que debería llamarse “horriblero”, porque está hecha pedazos y sin una sola señal de pavimentación cercana.

Vecinos de Tlaltizapán piden pavimentación de su calle, pero las autoridades dicen que ya fue arreglada