Ya es común ver distintos retos en redes sociales, donde las personas hacen lo que sea por dinero, por un celular o incluso por conseguir vistas y dejan a un lado el peligro al que se puedan enfrentar o las consecuencias que tendrán con tal de alcanzar su objetivo y ahora un nuevo reto se volvió tendencia, nos referimos al “bone smashing”.
Este peligroso reto se está expandiendo por toda la red, ya que consiste en darse de martillazos en la cara, una y otra vez con el único objetivo de volverse más atractivos y tanto hombres como mujeres aceptan realizarlo para que mejore su aspecto físico.
Los altos estandares de belleza ha llevado a muchas personas a hacer lo inimaginable con tal de lucir más bellos físicamente y por ello se ven orillados a llevar a cabo peligrosas tendencias en internet, como esta que ha surgido que consiste en romperse los huesos de la cara.
¿En qué consiste el “bone smashing”?
Los jóvenes que se están animando a realizar este tipo de retos deben utilizar un martillo, un rodillo, una botella, un tubo, o cualquier objeto duro para golpear su cara e ir moldeandola a su gusto, quizá alterando sus pómulos, reduciendo el ancho de su rostro, la nariz o hacer más pequeña la frente.
El masaje empieza con leves golpeteos hasta que de verdad se dan con mucha fuerza y someten su cara a un traumatismo por objeto contundente, ¡nos dio escalofríos!
Expertos en salud advierten de los riesgos que representan estas prácticas, que a decir de los influencers logran modificar la estructura ósea de su rostro haciéndola más atractiva, lo que es totalmente falso.
El golpear la cara con un martillo puede resultar en fracturas graves en los huesos faciales, los huesos de la cara son delicados y no deben ser manipulados de esta manera, las fracturas faciales pueden causar dolor intenso, inflamación y deformidad permanente.
Además, se ha detectado que este tipo de retos no solo afecta la salud física, sino también mental.
Es de vital importancia que los padres estén pendientes del contenido que ven sus hijos en redes sociales y platicar con ellos de su apariencia física, para evitar que realicen este tipo de actos y no pongan en riesgo su salud física y emocional.
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