Según datos de la Conagua y análisis de la UNAM, el promedio mensual de precipitaciones en 2025 alcanzó los 155.5 milímetros, superando el récord histórico de 1941, que era de 99.8 mm. Los meses más intensos fueron junio y septiembre, con picos de 158.1 mm, lo que representa el nivel más alto en más de 80 años. Este fenómeno ayudó a que las 210 principales presas del país alcanzaran un almacenamiento de más de 85 millones de metros cúbicos, reduciendo el déficit hídrico nacional a solo 3%.
Las lluvias beneficiaron cultivos, recargaron acuíferos y aliviaron zonas con sequía. Pero también causaron inundaciones, deslaves y afectaciones en zonas urbanas. Expertos señalan que este patrón extremo podría estar vinculado al cambio climático, y advierten que debemos prepararnos para fenómenos cada vez más intensos.
2025 será recordado como el año en que México rompió el récord de lluvias. Un fenómeno que nos recuerda que el clima está cambiando y que el agua, cuando llega, puede transformar todo.
Nivel actual de las presas en México a octubre 2025








