Capricho que salió caro: Los engaños detrás de la refinería Dos Bocas en Tabasco
Tres años después y con más de 500 mil millones de pesos gastados, Dos Bocas solo refina poco menos de su capacidad; una obra que ha pasado factura.
La refinería Olmeca, mejor conocida como Dos Bocas, prometía ser el emblema energético del sexenio del “Bienestar”. Se presentó como una obra clave para alcanzar la autosuficiencia en combustibles, con la capacidad de procesar 340 mil barriles diarios de crudo mexicano.
Pero a tres años de su “inauguración simbólica” aquel 1 de julio de 2022, la realidad es que ni siquiera logra refinar una tercera parte de la cantidad prometida, y lo peor de todo, sigue en una fase de pruebas.
¿Qué produce realmente la refinería Dos Bocas hoy?
Actualmente, el complejo sigue en lo que técnicos llaman “pruebas operativas de integración”. ¿Qué significa eso? Que todavía no funciona como una refinería completa.
Recibe alrededor de 93 mil barriles diarios, pero no de crudo, sino de productos intermedios provenientes de otras refinerías.
Es decir, no transforma petróleo en gasolina o diésel como debería, sino que participa en una especie de preproceso que necesita completarse en otras plantas.
De acuerdo con el analista en energía Paul Sánchez, la refinería aún no cumple su función principal: procesar crudo mexicano desde cero. Además, parte del combustible que se produce en el sitio todavía debe validarse bajo la Norma 016, la cual regula que las gasolinas sean aptas para consumo y puedan ser distribuidas en el mercado nacional.
¿Cuánto ha costado realmente la refinería Dos Bocas?
Uno de los aspectos más cuestionables del proyecto es su costo. Originalmente, se dijo que la obra costaría 160 mil millones de pesos. Sin embargo, el presupuesto se desbordó, y para 2025 ya supera los 500 mil millones.
Pero el derroche de dinero no termina ahí, ya que aún falta conectar el suministro de gas, resolver la logística de transporte, afinar la integración tecnológica de los sistemas y probar la operación a gran escala.
De acuerdo con especialistas, el gasto podría llegar incluso a los 600 mil millones en los próximos meses, una cantidad exorbitante hasta para el gobierno que celebra la austeridad.