Las fábricas de la ciudad no están dando abasto y los dueños de los negocios señalan que esto no había pasado en muchos años, por lo que están preocupados, pues el intenso calor hace que las personas consuman más de lo que producen.
La gente está desesperada y recorre muchos lugares con tal de encontrar hielo, pero se encuentran con la mala noticia de que no hay, ya que no se tiene el abasto suficiente para cubrir la alta demanda.
Los vendedores señalan que el pasado fin de semana no tuvieron ventas al público, lo que sin duda afectó a los que tenían eventos programados, como las fiestas; esta situación hizo enfurecer a los clientes, ya que las opciones para conseguir hielo se les agotan.
Las distribuidoras no reciben la misma cantidad de hielo
Los congeladores lucen vacíos y ello provoca un efecto dominó, por lo que las personas han señalado que han tenido que conseguirlo de poquito en poquito, lo cual no les es suficiente, porque se les acaba rápido.
Las ocho distribuidoras de hielo ubicadas en las inmediaciones de la central de abasto y la nueva viga reciben, normalmente, 400 toneladas de hielo, sin embargo, en estos días de escasez han recibido solo 250.
La carencia de este, el nuevo oro cristalino, ha llevado al comerciante a vender exclusivamente a los de siempre, a sus clientes frecuentes y aún así, se ha recortado la venta; cada cliente recibe solo la mitad de lo habitual.
