El pozole, uno de los platillos más representativos de México, que seguramente ya has comido en estas celebraciones del 15 y 16 de septiembre; genera a muchos un par de dudas sobre si... ¿es saludable o engorda?
Y es que de acuerdo con especialistas en nutrición, el pozole puede formar parte de una dieta equilibrada si se consume en porciones moderadas y con los acompañamientos adecuados. Ya que su aporte depende de los ingredientes con que se prepare; no es lo mismo un pozole blanco ligero que uno con abundante carne y frituras añadidas.
¿El pozole es saludable?
Sí. El pozole puede considerarse un platillo saludable porque combina los tres grupos de alimentos: maíz (carbohidrato), carne (proteína) y vegetales como lechuga, rábanos, cebolla y orégano. Estos ingredientes aportan fibra, vitaminas y minerales, pero, el detalle está en los extras como las tostadas, la crema o el chicharrón, que aumentan las calorías y grasas de este platillo.
¿Qué cantidad de pozole recomienda comer el IMSS?
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) señala que una porción adecuada de pozole equivale a una taza y media (aprox. 90 gramos de maíz y 60 gramos de carne). Acompañarlo con verduras y moderar las guarniciones es clave para que sea un platillo balanceado y no excesivo en calorías.
Información nutricional del pozole
En promedio, un plato de pozole aporta entre 240 y 400 calorías, dependiendo de la preparación:
- Pozole blanco: entre 240 y 280 calorías por plato.
- Pozole verde o rojo: entre 300 y 380 calorías.
- Con guarniciones abundantes (tostadas, crema, cueritos): puede superar las 500 calorías.
Así que no te apures, no comas con culpa tu recalentado, ya que además, el pozole también ofrece proteínas de buena calidad como hierro, fibra y vitaminas del complejo B, lo que lo convierte en una opción más completa que otros antojitos mexicanos.
El origen del Pozole, ¿cura las penas?