La piel es el órgano más grande del cuerpo humano y alberga una comunidad diversa de microorganismos que conviven en equilibrio. Este conjunto de bacterias, hongos, virus y ácaros recibe el nombre de microbioma cutáneo y desempeña funciones esenciales para la salud dermatológica.
A continuación, te contaremos más a fondo sobre su importancia y cuál es su función para nuestra salud.
¿Qué es el microbioma cutáneo?
El microbioma cutáneo está compuesto por billones de microorganismos que colonizan la superficie y las capas superiores de la piel desde el nacimiento. Su composición varía según la zona del cuerpo, y factores como la edad, el género, el estilo de vida, el uso de jabones antibacterianos y la exposición ambiental modulan constantemente esta población.
Algunos estudios han identificado más de mil especies bacterianas y 80 especies de hongos en la piel sana, formando un ecosistema que se adapta a condiciones locales de pH, humedad y sebo.
¿Para qué sirve el microbioma cutáneo?
Actúa como primera línea de defensa inmunológica, pues las bacterias "buenas" compiten por espacio y nutrientes contra diversos patógenos, previniendo infecciones. Además, producen ácidos grasos y péptidos antimicrobianos que regulan la inflamación y fortalecen la barrera cutánea.
En enfermedades como el acné, la dermatitis atópica o la psoriasis, se observa un desequilibrio que agrava los síntomas. Mantener su diversidad mediante higiene, evitar antibióticos tópicos innecesarios y usar prebióticos cutáneos favorece la recuperación de la piel y reduce la dependencia de tratamientos agresivos.









