Este sitio ha sido testigo de fenómenos paranormales desde la década de 1930, cuando comenzaron los reportes de objetos voladores no identificados y sucesos inexplicables.
La historia tomó un giro en 1994 con la familia Sherman, que aseguró haber visto orbes brillantes, figuras humanoides y un enorme lobo inmune a las balas. Años después, el empresario Robert Bigelow compró la propiedad para investigar, y en 2016 pasó a manos de Brandon Fugal, quien permitió el acceso al equipo del programa El Secreto de Skinwalker Ranch.
Hoy, el rancho sigue siendo un enigma: ¿actividad extraterrestre, experimentos secretos o simple sugestión? Nadie lo sabe, pero las historias no paran.
La Leyenda de las Tejedoras del Destino








