Las quemaduras domésticas suelen ser accidentales: pueden ocurrir al tocar la estufa, manipular utensilios calientes o consumir alimentos recién cocinados. Le pueden pasar tanto a niños como a adultos. ¿Pero qué hacer si no tienes un botiquín de primeros auxilios a la mano?

Primero, identifica el tipo de quemadura.

  • Primer grado: son las más leves, afectan solo la capa externa de la piel y provocan dolor leve, enrojecimiento e hinchazón.
  • Segundo grado: alcanzan capas más profundas y generan ampollas, además de una piel húmeda, brillante y blanquecina.

Si la quemadura es menor, deja correr agua a temperatura ambiente sobre el área afectada durante al menos 20 minutos para aliviar el dolor y evitar que avance.

¡Cuida tu espalda! Hábitos diarios que te lastiman sin darte cuenta