Aunque no lo creas, y por más extraño que suene, el tomar cerveza después de realizar deportes de resistencia tiene bastantes beneficios. Algunos ejemplos de este tipo de actividad física son la natación, el ciclismo o triatlón. Pero eso es lo de menos, pues incluso después del entrenamiento en el gimnasio o un partido de viernes por la noche, puedes beber un par de tragos.
Eso sí, tiene que ser una cerveza en específico, y por supuesto, una cantidad moderada, pues de no hacerlo así, los beneficios que podrías ganar al consumir esta bebida después de la actividad física se verían reducidos.
¿Qué cerveza se puede tomar después de hacer ejercicio?
En julio de 2021, el International Journal of Sport Nutrition and Exercise Metabolism publicó un reporte sobre el consumo de cerveza en deportes de resistencia, e indicó que uno de los hallazgos realizados fue que la cerveza light puede ser una buena opción para la recuperación después del ejercicio.

Cualquiera que tenga un valor menor al 4 por ciento de contenido de alcohol funciona como una hidratación óptima, e incluso, añadir un poco de sodio puede ser beneficioso. Sin embargo, si pasa de este porcentaje, los beneficios disminuyen, pero podrías combinar la cerveza con comida, pues se pueden electrolitos.
No obstante, la mayor cantidad que deberías consumir son sólo dos, pues las propiedades diuréticas del alcohol implicaría perder las propiedades rehidratantes. Además, puede ayudar al sistema inmune, pues contiene polifenoles, compuestos vegetales antioxidantes y antivirales.
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