¿Tienen garrapatas los árboles de navidad?

Si tu Navidad no está completa sin ese aroma a pino recién cortado, hay un detalle que no deberías pasar por alto: los habitantes inesperados que pueden viajar ocultos entre las ramas. Nada nuevo bajo el sol, pero sí algo que conviene prevenir antes de convertir tu sala en un pequeño bosque invernal.

¿Pueden venir garrapatas en el árbol? Sí, aunque no es lo más comúnLa enfermedad de Lyme —esa infección bacteriana transmitida por la picadura de garrapatas infectadas— suele asociarse a pastizales y zonas boscosas. Pero en otoño e invierno, cuando el clima sigue cálido, algunas garrapatas pueden terminar en árboles de Navidad naturales.

No es lo habitual, pero puede pasar. De hecho, en casos raros se han encontrado varias garrapatas alejándose del árbol días después de instalarlo dentro de casa. Nada para entrar en pánico, pero sí para actuar con cabeza fría.

La regla de oro: revisa antes de decorarAntes de comprar y llevar tu árbol al interior:

  • Sácalo al exterior y sacúdelo suavemente. Esto ayuda a desprender insectos que hayan quedado atrapados.
  • Pásale una aspiradora de mano, especialmente entre las ramas más densas.
  • Evita insecticidas. Muchos son inflamables y dañan el árbol; además, no son necesarios si haces una buena revisión.
  • Revisa la base y el tronco, donde pueden esconderse más insectos.

No solo garrapatas: también puede haber pulgón de cinaraEstos pequeños visitantes, parecidos al pulgón común pero asociados a los pinos, llegan a los árboles después de la cosecha y pueden viajar hasta tu hogar. Son inofensivos para ti —no muerden ni transmiten enfermedades—, pero sí pueden aparecer en paredes o muebles cuando el ambiente cálido de la casa los despierta.

La solución es la misma: revisión, sacudida, limpieza y observación.

En resumen: disfruta tu árbol, pero con prevenciónUn árbol natural siempre trae magia… y a veces algún pasajero sorpresa. Nada grave si actúas antes de poner la estrella en la punta. Revisa, limpia y mantén el hábito de echarle un ojo los primeros días.

La Navidad se disfruta más cuando empieza sin sobresaltos