Poco a poco, más personas están rompiendo el silencio y pidiendo ayuda cuando la ansiedad, el estrés o la tristeza se vuelven parte del día a día. Y eso, ¡es una gran noticia!

Atrás quedó la idea de que “ir al psicólogo es para locos”. Hoy sabemos que cuidar la mente es tan importante como hacer ejercicio o comer bien. Desde apps de meditación hasta charlas entre amigos, las nuevas generaciones están cambiando la forma en que entendemos el bienestar emocional.

Recordar que pedir apoyo no es debilidad, sino un acto de amor propio, puede ser el primer paso hacia una vida más ligera y feliz.

Tragedia de Sophie reabre debate sobre IA y salud mental